‘PJ HARVEY: A DOG CALLED MONEY’ / El fotógrafo de guerra Seamus Murphy sigue los pasos de la cantante británica PJ Harvey durante la creación de The Hope Six Demolition Project. www.cinesrenoir.com

Una frase que el reconocido reportero de guerra Seamus Murphy escuchó en su primer viaje a Afganistán en 1994, en medio de una guerra civil sangrienta, abre esta película documental. Las palabras –“me dijeron que, hace veinte años, se podría comprar una entrada de cine con balas”- las pronuncia su amiga Polly, conocida como PJ Harvey.

“Debí habérselo contado cuando estuvimos juntos en Kabul en 2012. Cuando escucho a Polly leer esa frase ahora, con la distancia que dan los años, es como una antigua leyenda mitificada que vuelve a cobrar vida –dice Murphy, director de esta película-. Era una nota entre muchas en las libretas que llevaba consigo cuando viajamos juntos a Kosovo, Afganistán y Washington D. C. para nuestro proyecto colaborativo”.

Aquellas libretas a las que se refiere contenían notas, garabatos e impresiones inmediatas de primera mano, además de pautas para ella misma sobre cómo cantar las canciones que iba invocando en las páginas mientras viajaba. Fragmentos de todo ello se han convertido ahora en el material de esta película documental.

Esas mismas notas se convirtieron en las canciones del disco The Hope Six Demolition Project, noveno álbum de la cantante y compositora británica, que lo grabó en un sótano del Somerset House de Londres. Y, precisamente, el proceso creativo de este trabajo es el que documenta en esta película Seamus Murphy.

“Polly y yo decidimos colaborar y emprender un proyecto juntos. Queríamos que fuera un libro (su poesía, mi fotografía), un disco que grabaría ella y una película que haría yo. Queríamos ir a sitios que nos interesaran, que tuviesen relevancia para nosotros por un motivo u otro, compartiendo la experiencia pero trabajando de forma individual. Escribir y fotografiar son prácticas muy diferentes, así que yo tendría que volver para ampliar el trabajo. Serían viajes informativos, la clásica combinación de escritor y fotógrafo. Seríamos periodísticos, pero no periodistas”.