‘CORAZÓN DE LEÓN’ / Marcos Carnevale empequeñece a Guillermo Francella para retratar una sociedad cargada de prejuicios y sometida a la dictadura de la moda y de la estética. Julieta Díaz coprotagoniza esta comedia con el actor, que trabaja por primera vez junto a su hijo Nicolás.

Betiana Blum y el propio director, Marcos Carnevale, son los autores del guion de esta comedia, una historia de amor con un componente muy especial, el del tamaño del personaje masculino principal. Guillermo Francella y Julieta Díaz son los protagonistas de la película, relato de un romance singular. Ivana, una abogada divorciada que mantiene relación con su ex, que es también su socio en el despacho, ha perdido su teléfono móvil. Por la noche recibe la llamada de un hombre que ha encontrado el aparato y quiere devolvérselo. La conversación va descubriendo a un tipo encantador, un auténtico seductor que despierta en ella el deseo inmediato de conocerle. Él es León, un arquitecto reconocido, un profesional con prestigio y dinero, divorciado, padre de un hijo veinteañero. Es un tipo atractivo y encantador, que mide 1,37 m. Corazón de León es una película que señala con el dedo, afea los prejuicios con los que vive esta sociedad supuestamente civilizada, pero lo hace desde la comedia, con una historia de amor y con una mirada muy en positivo. “Hay un optimismo en la historia”, dice el propio Guillermo Francella, que explica que su personaje, aunque muy bajito, “genera una seducción, mientras que ella viene de una crisis, así que en él encuentra una especie de oasis. Sí, se encuentra con un tipo de 1,37, lo que la desorienta, pero él hace tal despliegue de personalidad…” “Todos somos un poco enanos en esta sociedad porque culturalmente desde muy chiquitos se nos mete un listado en la cabeza que tiene que ver con que tenés que ser alto, buen mozo, preferentemente cristiano, con una cuenta bancaria importante, vivir en tal lugar y usar ropa de una marca determinada”, explicó el director y guionista Marcos Carnevale en una entrevista con Télam. En aquella charla, el cineasta añadía: “El argentino es muy mirón, salimos y juzgamos permanentemente y eso es muy peligroso. Desde luego, la figura del enano es una exageración para poder explicar que todos somos enanos y a veces también jueces. En este mundo es tanto lo que te exigen  que eso te fuerza a no poder cumplir con casi nada y así al ser infelices necesitamos crear un propio personaje para que los demás terminen aceptándonos”.         Dirección: MARCOS CARNEVALE. Guion: BETIANA BLUM Y MARCOS CARNEVALE. Producción: AXEL KUSCHEVATZKY Y FERNANDO SOKOLOWICZ. Fotografía: HORACIO MAIRA. Montaje: ARIEL FRAJND. Música: EMILIO KAUDERER. Reparto: JULIETA DÍAZ, GUILLERMO FRANCELLA, MAURICIO DAYUB Y NICOLÁS FRANCELLA. Distribuidora: Nirvana. Estreno: 18 de julio de 2014.