Antoni Benaiges fue un maestro de Tarragona que poco antes de que comenzara la Guerra Civil fue destinado a una pequeña escuela en el pueblo de Bañuelos de Bureba, en Burgos. Allí se ganó el cariño de todos sus alumnos y la enemistad del cura y de los falangistas de la zona. En cuanto comenzó la guerra, le asesinaron.

Inspirada en la historia real y en el libro escrito por Frances Escribano, la película se rodó sobre un guion de Albert Val que reúne la peripecia vital de este hombre y la de una mujer, Ariadna, quien, muchos años después de aquel crimen, viaja a Burgos para saber si los restos de su abuelo se encuentran en una fosa común donde están exhumando restos.

Dirigida por Patricia Font, la película está protagonizada por un estupendo Enric Auquer, en el papel del maestro, y por Laia Costa, en el de Ariadna. Con ellos, Ramón Aguirre interpreta el personaje de uno de aquellos niños que perdieron a su maestro a manos de los falangistas. Luisa Gavasa, Gael Aparicio, Alba Hermoso y Nicolás Calvo completan el reparto.

“La película aborda el tema de la memoria histórica directa e indirectamente, entrelazando esos dos relatos: la historia del maestro Benaiges en 1935, basada en hechos reales, y la de Ariadna en 2010, personaje ficticio que representa a los descendientes de los desaparecidos”, dice la directora, quien añade: “La interacción entre estas dos tramas transmite un mensaje: lo que ocurre en el pasado repercute en nuestro presente en forma de herida transgeneracional”.

“Me parece interesante la tesis según la cual somos capaces de heredar las heridas de nuestros antepasados. En el filme, los hechos que suceden en el pasado tienen consecuencias sobre los personajes del presente y la relación entre ellos. Este relato gira entorno a la memoria, tanto a la pérdida de ella como a la importancia de mantenerla”.