Ariel Winograd tuvo una boda un tanto desafortunada, nada salió bien. Así que decidió contar en el cine la historia de una boda en la que todo sale mal. Esta comedia es Mi primera boda y con ella el director se une a la larga lista de bodas que se han mostrado en el cine. Las hay de todas las religiones y colores, en todos los rincones del mundo, emocionantes y absolutamente frías. Aquí van cuatro que no gustan mucho:

‘El Padrino’ (Francis Ford Coppola, 1972)

La boda de Connie, la hija de Vito Corleone, y Carlo Rizzi abre la trilogía más importante de la historia del cine. La novia estaba interpretada por Talia Shire, hermana del genial Coppola, y por Gianni Russo. Al Martino daba vida a Johnny Fontane, uno de los ahijados del padrino. Las anécdotas alrededor del rodaje de esta boda son sabrosísimas para los amantes del gran cine.

‘Cuatro bodas y un funeral’ (Richard Curtis, 1994)

Cuatro por el precio de una. Fantástica y muy popular comedia de Richard Curtis, donde un guapísimo Hugh Grant se exhibió de lo lindo y convenció a todo el mundo, tanto que se quedó definitivamente con el sobrenombre del ‘nuevo Cary Grant’. Le acompañaban, entre otros, Andie Macdowell, Kristin Scott Thomas y Simon Callow.

‘El hijo de la novia’ (Juan José Campanella, 2001)

Una de las bodas más tiernas de todas las que hemos visto en la gran pantalla. Norma Aleandro y Héctor Alterio eran los novios y Ricardo Darín interpreta el personaje del hijo. La película fue la puerta a España de este equipo de creadores argentinos, que siguen haciéndonos grandes regalos.

‘La novia cadáver’ (Tim Burton, 2005)

Es una de las bodas más singulares de toda la historia del cine. La novia es una misteriosa muertecita y el novio es un chico al que han enviado al infierno. Hay otra novia, claro, en el mundo de los vivos. Tim Burton se coló con esta película entre las candidatas al Oscar a Mejor Película de Animación y ganó unos cuantos premios en varios festivales.