La nueva película de la veterana cineasta Margarethe von Trotta cuenta la conflictiva relación que mantuvo la poetisa austriaca Ingeborg Bachmann con el dramaturgo alemán Max Frisch, cuando se cumple el 50 aniversario de la muerte de la primera. Vicky Krieps y Ronald Zehrfeld son los protagonistas.

Viaje hacia el desierto presenta a Bachman cuando ésta ha conseguido el éxito, una situación única como mujer en el cerrado territorio de los hombres de la literatura en lengua alemana. Es ese momento en el que esta autora conoce al famoso dramaturgo Max Frisch y entre ellos surge inmediatamente un amor apasionado.

Las envidias profesionales, los celos personales van carcomiendo a la pareja hasta que él se marcha, entonces Bachmann inicia un viaje hacia el desierto egipcio con dos amigos, Hans Werner Henze y el joven periodista Adolf Opel. En ese lugar la escritora se reencontrará con ella misma y con su poesía.

La veterana cineasta vuelve a trazar el retrato de una mujer en el cine, después de hacerlo con personajes esenciales como Rosa Luxemburg, Hannah Arendt o Hildegard von Bingen en películas anteriores.

Estrenada en el Festival de Berlín, en sección oficial a competición, la película se rodó sobre un guion de la propia directora, que empleó ciertos textos de Ingeborg Bachmann en algunos de los diálogos y contó con la complicidad de Vicky Krieps para el personaje.

“Conocí a Ingeborg Bachmann desde el principio. Con sus poemas. Pero fue sólo durante el rodaje que descubrí que compartíamos algo: la desconfianza hacia el lenguaje. Incluso cuando era niña, dudaba de las personas y de sus reglas y acuerdos. Y luego, tal vez porque crecí trilingüe, equiparé este sentimiento con el lenguaje. La poesía de Bachmann fue como una liberación. Los poemas no te dicen lo que necesitas entender. Qué está bien y qué está mal. Abren un espacio en el que puedes sentir y ser”, dijo la actriz en una entrevista con Elle Alemania.