El director y guionista Pau Teixidor dedicó tiempo a investigar y documentarse sobre los casos de bebés robados en España. En ese tiempo entrevistó a muchas mujeres y fueron sus testimonios los que dieron el tono a la película Alumbramiento.

“Siempre tuve claras las dos problemáticas sobre las que articular nuestro guion: los internamientos de adolescentes embarazadas en centros tutelados por el Estado, y la cuestión de los robos de bebés en la España de principios de los ochenta”, dice el director, que reconoce que fueron aquellas mujeres las que aclararon el camino que debía seguir.

“El personaje de Lucía, la protagonista de esta historia, se ha construido a partir de los relatos de todas estas mujeres. Mujeres como Loli, Carmen, Mercedes, Marisol o Cecilia. Mujeres con la dignidad y entereza suficiente como para seguir forjando, a través de toda una vida, la identidad que les fue arrebatada”.

“Tal vez por este motivo, un día apareció una frase durante el proceso de escritura que, además de sintetizar la imagen que tenía de ellas, condensaba de forma poética y enigmática lo que, quizás, hemos tratado de hacer con esta película: ‘Lucía es como el bambú, se dobla pero no se parte’”.