Brie Larson es una de esas jóvenes actrices que lleva el sello de ‘prometedora’ desde sus primeros papeles. Protagonista ahora de Las vidas de Grace, una película independiente del hawaiano Destin Cretton, ha conseguido muy pronto la popularidad gracias a United States of Tara, una serie creada por Diablo Cody y producida por Steven Spielberg. En su nuevo trabajo, interpreta a una supervisora de un centro de acogida de adolescentes con problemas. Ella misma interpretó a varios adolescentes antes de hacerse famosa y fue precisamente con aquellos papeles con los que empezó a ‘prometer’. Parece que sigue los pasos de otros que muy jóvenes ya auguraban mucho éxito en sus carreras.
James Dean
Es uno de los casos más emblemáticos del cine y, al mismo tiempo, más tristes por su tempranísima muerte. Muy joven, James Dean apuntó lo lejos que hubiera podido llegar si no se hubiera cruzado aquel accidente mortal en su vida. Con solo tres títulos dejó clarísimo el talento que tenía.
Al Este del Edén, Rebelde sin causa y
Gigante fueron ejemplos sobrados del recorrido que podría haber tenido.
Jodie Foster
Es una auténtica niña prodigio del cine, una mujer que despuntó muy joven en la gran pantalla. Actriz y directora de prestigio hoy, debutó con trece años ni más ni menos que en
Taxi Driver, con el papel de una menor que se gana la vida en la calle como prostituta, con el que fue candidata al Oscar. Ese mismo año trabajó en
Bugsy Malone y ganó dos premios BAFTA. Todas aquellas interpretaciones estaban ya cargadas de personalidad y de brillo. El mismo que la sigue acompañando.
Leonardo DiCaprio
Comenzó a actuar muy joven, de niño, pero fue gracias al olfato de Robert De Niro que destacó por primera vez. Tenía diecinueve años cuando protagonizó
Vida de este chico, una película inspirada en la juventud del escritor Tobias Wolf. Allí ya dio pruebas de su potencial. DiCaprio apuntaba, desde luego, maneras. Y estas se vieron muy poco después en
¿A quién ama Gilbert Grape? donde interpretaba a un chico con una discapacidad mental, hermano de Johnny Depp, y en
Diario de un rebelde, una película basada en la vida de Jim Carroll.
Juan José Ballesta
No es el único caso en el cine español, aunque sí es uno de los más evidentes. Con trece años debutó en el cine con
El Bola, de Achero Mañas. Ganó el Premio Goya al Actor Revelación y el Premio de la Unión de Actores en la misma categoría. Solo cinco años más tarde, con dieciocho, ya se había hecho con La Concha de Plata por su papel en
7 virgenes. Antes había destacado en otras películas, como
El embrujo de Shanghai, El viaje de Carol o
Planta 4ª.
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