Erik y Paul, los protagonistas de Keep the Lights on, viven una apasionada historia de amor y una ruptura posterior, una relación inspirada en la vida real de su director, Ira Sachs. Si lo primero, los relatos de seducción y enamoramiento, ha invadido siempre las pantalla de cine, lo segundo, es decir, los desencuentros, desamores, las rupturas… han sido protagonistas de algunos grandísimos títulos del séptimo arte. Ahí van cuatro de ellos.

‘Casablanca’, Michael Curtiz (1942)

Rick e Ilsa (Humphrey Bogart e Ingrid Bergman) no se separan por una cuestión de desamor, todo lo contrario, es el amor que él siente por ella lo que le hace empujarla lejos, evitando que llegue el día en que se puede arrepentir de haber tomado otra decisión. Una ruptura sentimental inolvidable.

‘New York, New York’, Martin Scorsese (1977)

Jimmy Doyle y Francine Evans, impresionantes Robert de Niro y Liza Minelli, se aman enloquecidamente y su ruptura es muy dolorosa. El éxito se interpone entre ambos, haciendo que pierdan lo mejor que jamás nadie va a encontrar en la vida, es verdadero amor.

‘Annie Hall’, Woody Allen (1977)

Es la ruptura cinematográfica más entretenida de la historia y, seguramente, la más imitada de todas. El filme conquistó cuatro Oscar: Mejor Película, Woody Allen se llevó el Oscar a Mejor Director, compartió con Marshall Brickman el de Mejor Guion Original y Diane Keaton ganó el de Mejor Actriz. (“Annie y yo rompimos, y aún no puedo hacerme a la idea”).

‘Los puentes de Madison’, Clint Eastwood (1995)

Todos los espectadores de esta película querrían que Francesca (Meryl Streep) hiciera la maleta y huyera con Robert Kincaid (Clint Eastwood). Uno para otro son el verdadero amor, pero la responsabilidad de ella como esposa y madre hace imposible, al menos eso piensa ella, una hermosa y feliz historia de amor.