El salto, con guion de Flora González Villanueva, es una película protagonizada por Moussa Sylla, Edith Martínez-Val y Eric Nantchouang, en la que se pone el acento en el riesgo de muerte de unos personajes que intentan llegar a España, donde esperan encontrar una vida mejor.

Para hacer la película, el director se metió en un proceso de investigación que les llevó a Melilla, “para ‘tocar’ la valla e ir al CETI” y conocer sobre el terreno cuál era la realidad de los inmigrantes que la habían saltado. En Algeciras y Sevilla, lo mismo que en Madrid, se reunieron con varias asociaciones de ayuda y apoyo a las personas migrantes africanas y con los propios inmigrantes.

Tuvieron encuentros con inmigrantes, asociaciones, ONG y expertos, que les asesoraron sobre la complejidad de la inmigración africana, sus problemas y todo lo relacionado con las deportaciones.

“Para mí fue un ejercicio de inmersión muy revelador, y muy duro por el sufrimiento que estaba descubriendo. Me di cuenta de que, como ciudadano, no sabía nada de la realidad de estos hombres y mujeres que se habían jugado la vida para llegar a Europa”.